ARTÍCULO 10 – PARTICIPACIÓN PERSONAL EN LA VIDA DE LA ASOCIACIÓN (SEGUNDA PARTE)
La admisión del Candidato a la Asociación es aprobada por el Presidente con su Consejo. Será precedida de un tiempo suficiente de preparación no inferior a un año, con reuniones al menos una vez al mes. El Candidato expresa su adhesión a la Asociación durante una celebración en honor de María Auxiliadora. Se entregarán a cada uno los Estatutos, un certificado de inscripción y un distintivo de su pertenencia a la Asociación.
Como hemos podido observar, la Asociación vive del compromiso, de la implicación y participación de cada socio.
Todo grupo local debe cuidar de modo particular el acompañamiento de quien expresa el deseo y la voluntad de pertenecer a ADMA. En efecto, la adhesión de nuevos miembros, es expresión de la vitalidad asociativa y respuesta a las continuas gracias de María Auxiliadora.
El itinerario de preparación debe vivirse con intensidad y fidelidad a fin de conocer el espíritu asociativo también mediante la profundización y el estudio del Reglamento
La admisión por parte del Presidente con su Consejo es muy importante y requiere una seria evaluación de los candidatos interesados en pertenecer a la asociación.
La manifestación y adhesión a ADMA tiene lugar durante una celebración el honor de María Auxiliadora, para hacer visible el propósito de poner la propia vida a servicio de los hermanos.
La personas que residen en territorios donde no existe algún grupo, se comunican con el grupo más cercano o con la Primaria de Turín.
La asociación local debe preocuparse por la formación permanente de los socios a través de actividades en sintonía con el Reglamento y en comunión con el Consejo Inspectorial y con ADMA Primaria.
Todo asociado está invitado a contribuir con donaciones en un espíritu de generosa caridad, con particular atención a las necesidades de toda la Asociación.
Andrea y María Adele Damiani
